La percepción antecede y condiciona la acción, pero no lo hace directamente, sino que lo hace mediante un poderoso agente que es la emoción. Esta palabra deriva de emovere, que en latín quiere decir "poner en movimiento". La emoción pone en movimiento tanto las funciones internas del organismo como el comportamiento externo. Aunque hasta hace muy poco tiempo las emociones eran ignoradas por la ciencia, porque parecían demasiado subjetivas y no se podan medir, ahora son uno de los asuntos más int...