La zona de confort es uno de los enemigos del desarrollo personal. Por eso, resulta necesario comenzar a trabajar en ella durante las sesiones de coaching ejecutivo. Como su propio nombre indica, la zona de confort funciona como un espacio inmaterial que nos aporta seguridad, que nos hace repetir patrones. En la práctica, está compuesta por muchos aspectos tan diferentes entre sí como nuestros propios conocimientos, experiencias, actitudes, hábitos, modo de vida, círculos sociales y habilidades,...